Seleccionar página
 
¿Qué se cuece en Europa?
 
Por Tere Vaquerizo 
 
Es un fenómeno global. Los nuevos templos gastronómicos, situados en antiguos mercados de abastos reformados o en edificios de nueva construcción, arrasan también fuera de nuestras fronteras. Esta es una pequeña selección de los que no te deberías perder si visitas alguna de estas ciudades.
 
Markthalle Neun, Berlín: Un bonito edificio del siglo XIX en Kreuzberg acoge este mercado en el que se celebran diferentes eventos gastronómicos: el Streetfood Thursday, donde cocineros aficionados compiten para que el público les vote como los mejores; el Breakfast Market, cada tercer domingo de mes, con todo tipo de delicatessen para desayunar a lo grande; o el Naschmarkt, el mercado de dulces que se celebra una vez cada tres meses.
 
Street Feast, Londres: Dinerama, Hawker House, Giant Robot y Public. Cuatro espacios gestionados por Street Feast. En todos se puede tapear, tomar una copa y hasta bailar. Dinerama, en Shoreditch, está abierto de miércoles a sábado; Hawker House, en Canada Street, tiene 3 plantas y abre las noches de viernes y sábados; Giant Robot está situado en una azotea en Crossrail Place; y acaban de recuperar un antiguo mercado que han llamado Public, en Woolwich. Decir cool, se queda corto. 
 
 
Markthal, Rotterdam: A diferencia de la mayoría de nuevos mercados, que se ubican en antiguos edificios a los que se les ha dado una nueva vida, el Markthal es un mercado de nueva construcción cuya increíble arquitectura se ha convertido en una de las señas de identidad de la ciudad. En este mercado se pueden comprar productos de calidad y de temporada, así como disfrutar de la mejor gastronomía internacional. 
 
Foodhallen, Amsterdam: El mercado perfecto para tapear a la holandesa. Se inauguró en 2014 en una antigua estación de tranvía. Hoy día acoge unos 20 puestos de delicias culinarias de todo el mundo donde no faltan los pimientos del padrón, el jamón serrano o los pinchos vascos. Además, programan DJ y música en directo. Y como Foodhallen es todo un éxito, están preparando la apertura de otro mercado en Rotterdam que se inaugurará este mismo verano.
 
 
Central Market Hall, Budapest: Imposible no admirar su imponente fachada. Este mercado se encuentra muy cerca del Danubio, en un edificio del siglo XIX que tuvo que ser reconstruido tras la II Guerra Mundial. Su interior, con una impresionante estructura de acero original, es igual de impactante que el exterior. El mercado tiene tres plantas donde se puede encontrar de todo: puestos de comida, tiendas de souvenirs, productos locales…
 
Vanha Kauppahalli, Helsinki: Abrió sus puertas en 1889, por lo que se le sigue llamando 'mercado viejo'. Renovado en 2013 es uno de los sitios imprescindibles que hay que visitar en la ciudad para probar cosas tan exóticas como la carne de reno, el paté de oso, o el Muikku, un pescadito típico finlandés. Además conserva la esencia del mercado tradicional y cuenta con un buen número de puestos donde se vende pescado, fruta y verdura. Y si sientes morriña estando allí, acércate a por una tortilla de patata o unas anchoas a su puesto El mercado. 
 
 
Mercato Centrale, Roma: El lugar idóneo para disfrutar a lo grande de las delicias gastronómicas made in Italy. Se encuentra situado en un ala de la estación de tren Termini, bajo la imponente arquitectura de la Cappa Mazzoniana. Nada más entrar lo primero que impacta es el delicioso olor a comida italiana. Imprescindibles las pizzas de Gabriele Bonci o las aceitunas fritas de Bellicampi. 
 
 
Mercado da Ribeira, Lisboa: Situado en Cais do Sodré, este mercado se inauguró en 1892 y ha sido remodelado en 2014. Cuenta con dos naves: en una se pueden comprar productos frescos y en la otra se puede disfrutar de más de 30 puestos de comida, elegidos entre los mejores de Lisboa por la revista Time Out, que es quien gestiona este espacio. También se imparten cursos de cocina y se programa música en directo.